Melchor Trejo Balsera ya da nombre a una glorieta en la avenida de la Paz

La glorieta de la avenida de la Paz ubicada en la intersección con las calles Luna, Ganadero y Cometa ya se denomina oficialmente Melchor Trejo Balsera, tras la celebración de un acto en la noche de este miércoles. Se trata de una petición de la asociación Alcer Badajoz, que presidió durante más de 40 años. Con ello se quiere realizar un reconocimiento a la labor realizada por este almendralejense contribuyendo a mejorar la calidad de vida de muchos extremeños.

Trejo Balsera, fallecido el pasado marzo de 2022, fue miembro fundador de Alcer Badajoz y presidente desde 1981. Además, formó parte de la junta directiva de la Federación Nacional a finales de los años 90 y principios de los 2000. Estuvo implicado desde sus inicios en la asociación y en la consecución del reconocimiento social que tiene actualmente Alcer después de tantos años de trabajo y dedicación. Todo ello ha sido destacado también por la actual presidenta, Patricia García, que ha manifestado que ha mostrado su agradecimiento por “rendir homenaje a quien dejó huella en tantos corazones”. Igualmente, su viuda, Isabel Preciados, se ha mostrado emocionada, recordando los kilómetros realizados por Trejo para hablar con cualquier compañero.

 

La inauguración de la conocida hasta ahora como ‘fuente del riñón’ coincide con la finalización de una serie de tareas de mejora realizadas en la fontanería y la iluminación, tratándose de la segunda fase de las obras, una vez que la primera consistió en el nuevo revestimiento de los tradicionales cubos. El alcalde, José María Ramírez, ha indicado que la fuente ahora podrá ser iluminada de distintos colores para conmemorar los días significativos. Además, ha destacado el “carácter conciliador que hacía una persona única” del homenajeado.

 

Por su parte, tras dar cumplimiento a este acuerdo plenario aprobado en su día por unanimidad para denominar diversos espacios de la ciudad, resta actuar de igual modo con los estudios de Radio Comarca de Barros, que recibirán el nombre de Eugenio Gragera López-Consuegra, así como el parque de la calle Jaraíz, que pasará a denominarse Antonio García Martín de las Mulas. Ya se procedió, por tanto, a rotular la sala de lectura principal de la biblioteca pública Marcos Suárez Murillo, como sala Silvestre Gómez Zafra, del mismo modo que ocurrió con el tramo comprendido entre la avenida de San Antonio y la calle Núñez de Balboa, denominado ya Arzobispo Celso Morga Iruzubieta.