El núcleo del Partido Comunista de España en Tierra de Barros ha instado, en una nota de prensa, “a la ciudadanía de la comarca a movilizarse, como ya hizo contra la refinería, para paralizar este despropósito económico, ecológico y social que supone el proyecto de nuevo macrorregadío en Tierra de Barros”. Desde el PCE señalan que “precisamente a finales de año comenzamos en la comarca una campaña contra este proyecto, y tras los últimos sucesos acaecidos, se demuestra que estábamos en lo cierto y que es un proyecto insostenible que pretende engañar a los agricultores de la zona con falsas promesas”.
Según explican en el comunicado este proyecto "no es viable debido a que “a sequía que ha sufrido Extremadura a lo largo de su historia se ve a día de hoy agravada por la emergencia climática provocada por el modelo capitalista, convirtiendo a Extremadura en una de las regiones más vulnerables de Europa”. A esto se une “que nuestra región se ve amenazada por las élites extractivas que ponen sus ojos sobre nuestros recursos que tratan de saquear independientemente del bienestar de la clase trabajadora”. En este sentido denuncian que “en Tierra de Barros se han puesto de acuerdo las élites económicas y políticas (PSOE, PP y Vox) para el expolio y saqueo de nuestra tierra y agua a través del proyecto del nuevo macro-regadío, lo que condenará a la comarca a la miseria, aunque ahora parece que la extrema derecha quiera denunciar este macro-proyecto, en realidad está a favor del mismo como el resto, mostrando todos una postura negacionista de la emergencia climática y de la realidad actual”.
El PCE señala que “todo esto ocurre en una región donde el mayor porcentaje de uso del agua se lo lleva la industria agroganadera (más del 80%). Esta situación no resultaría excepcional de no ser por las condiciones extremas de la situación de la región: una parte importante de los acuíferos subterráneos se encuentran en condiciones pésimas de almacenaje y salubridad incluso para el riego, debido a la explotación ilegal y al uso indiscriminado de pesticidas; además, debido a la sequía provocada por la emergencia climática, las reservas de agua han caído en los últimos años, teniendo que realizar importantes recortes en el riego para los cultivos tradicionales de regadío”.
Por ello, los comunistas advierten de que “El nuevo macro-regadío en Tierra de Barros es una losa más en una situación insostenible en la gestión y uso de los recursos hídricos. Se pretende volver de riego una plantación tradicionalmente de secano, en una comarca que no dispone por sí misma de los recursos hídricos necesarios para su sostén, que ya adolece de falta de agua y que ha sufrido cortes”. Por ello, señalan que “el poder nos dice que hay suficiente agua en otras comarcas, de donde se va a traer, pero esto, además de ser un parche que va a generar carestía en otras zonas donde el agua es tan necesaria como aquí, en quien va a repercutir es en el pequeño agricultor: serán las clases populares las que se endeuden por una nueva promesa de crecimiento económico, y las que acabarán, como ya está ocurriendo, malvendiendo sus tierras, recibiendo el golpe de la falta de recursos, destruyendo el tejido social de la comarca, y obligando a la juventud trabajadora a emigrar de su tierra ante la falta de oportunidades”.
Por todo ello, desde el PCE Tierra de Barros finalizan “animando a la población a luchar por la paralización del proyecto y el replanteamiento de los planes del sector primario, que parta de las necesidades y la participación de los obreros y obreras del campo, para evitar el sufrimiento que la crisis climática pueda causar a las familias trabajadoras extremeñas. Ya luchamos por nuestra tierra plantando cara frente a la refinería y hoy toca plantar cara contra un proyecto de las élites también pernicioso para el futuro de nuestra comarca”.
