La localidad extremeña de Almendralejo, acogió el pasado martes 30 de abril, la IV Tertulia BusinessAGRO del Olivar, un evento que unió en un mismo espacio, el Palacio del Vino y de la Aceituna, a todos los eslabones de la cadena de valor del olivar. Un encuentro, con la asistencia de más de un centenar de personas, que puso el foco de atención en las herramientas para una producción más sostenible, eficiente y competitiva, a la vez que analizar una problemática, no solo para este cultivo de la región, sino nacional: la revalorización de los subproductos.
El acto contó con la presencia del director general de Agricultura y Ganadería de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Sostenible de la Junta de Extremadura, José Manuel Benítez Medida, quien aprovechó su participación en la inauguración para anunciar que desde la Consejería se está trabajando en el diseño de una línea de préstamos bonificados para el olivar al considerar desde la administración como necesario que haya capital circulante en el sector. Asimismo, también anunció que están trabajando en un Decreto de Trazabilidad para la uva y la aceituna para mejorar la seguridad alimentaria y garantizar el seguimiento de estos productos.
Acompañaron al director general en esta inauguración institucional José María Ramírez Morán, alcalde del Ayuntamiento de Almendralejo, Ángel Pacheco Conejero, presidente de Cooperativas Agro-Alimentarias de Extremadura, ambas instituciones colaboradoras institucionales del evento, y Gissèle Falcón Haro, directora general de Siete Agromarketing y eComercio Agrario, entidades organizadoras de la tertulia, desarrollada con el objetivo de ser palanca de transferencia de conocimiento, “porque creemos que cuanta más formación tengan los agricultores, técnicos, se tendrá más rentabilidad en las explotaciones”, apuntó la directora general de Siete Agromarketing.
En el avance hacia una economía circular debemos abandonar el término residuos para adoptar el de subproductos: alperujo, ramas de poda, hojas y hueso, deben ser considerados como nueva fuente de riqueza, incluso teniendo en cuenta que, de la aceituna, solo el 25-30% corresponde a aceite. El rápido crecimiento de las explotaciones en la región, la rápida entrada en producción de nuevas explotaciones, olivares en seto y superintesivo, variedades más productivas… todo ello camina a una elevada generación de subproductos, y, por tanto, la necesaria revaloración de los mismos.
Durante la tertulia, pudimos conocer proyectores reales que nos hablan de elaboración de piensos para alimentación animal, compost, biofertilizantes, creación de pigmentos a partir de las hojas… Pero se necesita una masa empresarial fuerte, con iniciativas, y respaldada por la administración y centros tecnológicos que permitan hacer realidad estos proyectos empresariales, como así lo vienen haciendo en otros países.
En este sentido, durante la Tertulia se profundizó en proyectos en los que ya trabaja la Cooperativa de Segundo Grado Viñaoliva S.C., cuyo gerente Alberto Carrillo Espinosa, explicó la revalorización que ya desarrollan con los subproductos vitivinícolas y cómo estudian ahora su réplica en el olivar. “Nuestro objetivo prioritario es aumentar la rentabilidad y la revalorización del subproducto, junto con la autosuficiencia de los procesos”, afirmó el gerente de Viñaoliva.
Nuevos proyectos y estudios que están ya sobre la mesa, como los que compartió José Calama Arias, director de Troil Vegas Altas S.C. y en los que la entidad que representa está participando. En concreto compartió el proyecto de la Universidad Autónoma de Madrid basado en la reproducción de larvas con alperujo, y su uso como fuente de proteínas para la alimentación animal. “Otro de los elementos que considero muy necesario revalorizar es el alpechín, debido a su elevado nivel de rentabilidad. Cuando se aplica en el campo, enriquece el terreno con materia orgánica y además es ecológico, contribuyendo así a la economía circular”, destacó también José Calama Arias.
Alfonso Montaño García, responsable de Grupo de Investigación del Centro Tecnológico Nacional Agroalimentario – CTAEX, fue especialmente crítico con la administración, reclamando mayores apoyos para la materialización de proyectos en los que este centro está trabajando y que apuntan hacia los bioplásticos, biocompuestos o el compost, o pigmentos extraídos de las hojas recién cortadas. “El problema de los subproductos se genera cuando hay picos de producción. En momentos en los que se producen 10 litros de aceite por segundo, se generan entre 40 y 60 kilos de alperujo por segundo. Esto podría ser un gran problema si no existiera una red de alternativas para este subproducto”.
Cristina Fernández Gallardo, coordinadora de Servicios de Internacionalización en Extremadura Avante expuso, igualmente, algunas revalorizaciones posibles, trayendo como ejemplo las acciones que ya llevan a cabo en otros países como Dinamarca, que hoy por hoy es un gran importador de orujillo, o Brasil donde se trabaja mucho con este tipo de subproductos permitiendo nuevas salidas al mercado.
Esta VI Tertulia BusinessAGRO del olivar, también ha servido para conocer nuevas herramientas para una producción sostenible. Extremadura crece en olivar, con una superficie que en 2023 superaba las 296.190 hectáreas, lo que sitúa a esta región, como la tercera en superficie de olivar. Y las previsiones apuntan a un crecimiento continuo, especialmente de olivar en regadío.
Se hacen necesarias pues herramientas para garantizar producciones rentables y de calidad, como las que se mostraron durante esta jornada. Soluciones biológicas frente a enfermedades, como Serenade ASO, un fungicida y bactericida presentado por Bayer; o un completo portfolio de bioestimulantes dado a conocer por Daymsa, entre los que destacan Naturamin, Kelpak y Enerplus entro otros.
También hubo momentos para saber más de las ventajas de la fertirrigación mediante las bombas dosificadoras de ITC, que consiguen un aumento de la productividad en los cultivos y un ahorro en fertilizantes gracias a su tecnología.
Las nuevas variedades adaptadas al olivar tanto en secano como en regadío entre ellas la I-15P de Todolivo, así como las ventajas del olivar en seto, dadas a conocer igualmente por Todolivo, también despertaron la atención de los asistentes, pues lejos de mirar solo el volumen de aceituna, debemos buscar el balance entre la producción y los costes de producción, porque como recordaron en diversas ocasiones durante la jornada: “no se venden aceitunas, sino aceite y en el balance final hay que tener en cuenta lo que nos cuesta producir un litro de aceite”.