JUAN JOSÉ REYES // El préstamo de libros online de la biblioteca municipal de Almendralejo se ha disparado con motivo del estado de alarma. La cifra ya supera la cantidad de títulos que se descargaron en todo 2019, de modo que hasta la fecha son 61 los títulos que se han prestado, a lo que también contribuye el auge que está experimentado este tipo de lecturas, sobre todo, entre los más jóvenes. El concejal de Acción y Promoción Cultural, Domingo Cruz, ha destacado que son ellos quienes “cada vez están más acostumbrados” a acceder a estos libros a través de dispositivos electrónicos como tabletas o teléfonos móviles. En el caso de la biblioteca Marcos Suárez Murillo, los usuarios disponen de un importante catálogo, ya que cuenta con dos alternativas. Una de ellas es la plataforma Odilo, donde este servicio municipal ofrece 1.300 títulos de todo tipo. Sin embargo, los almendralejenses también pueden acceder a la denominada ‘Nubeteca’, que cuenta con un catálogo más extenso al congregar a todas las bibliotecas de la provincia. Gracias a un convenio con la Diputación de Badajoz, esta alternativa es gratuita. Además, el edil ha recordado que leer online cuenta con diferentes ventajas, ya que permite realizar consultas sobre el mismo texto o guardar notas, entre otras cosas. Cruz ha señalado que “durante estos días supone una buena alternativa porque la literatura es un buen refugio”.
Las personas que deseen acceder a los fondos de ambas plataformas pueden hacerlo a través de la web municipal, www.almendralejo.es, donde se les requerirá las claves pertinentes. En caso de no disponer de ellas, pueden solicitarse llamando al número de teléfono de la biblioteca, ya que los empleados municipales continúan trabajando en sus domicilios para llevar a cabo este tipo de cuestiones o realizar labores de asesoramiento a los usuarios. A ello se suman otras tareas administrativas, como la elaboración de la estadística anual sobre el uso de sus instalaciones o los trámites que se están gestionando para formar parte de una red nacional de bibliotecas. Según ha indicado Cruz, los trabajadores también sen encuentran creando diferentes guías de lectura.