Como es tradición, durante la celebración del acto central de las fiestas patronales tendrán lugar una serie de reconocimientos. En esta ocasión, se trata de las empresas Graginsa y Samarkanda, así como el agricultor Juan García Lavado. Todo ello se ha dado a conocer esta misma mañana en una rueda de prensa con la presencia de los protagonistas.
En el caso de la empresa de instalaciones industriales y agrícolas, se trata de una propuesta de la Coordinadora Empresarial de Almendralejo (Ceal), tratándose de un negocio que cuenta con una trayectoria de 47 años. Su responsable, Baltasar Gallardo, ha manifestado que “los inicios fueron difíciles”, habiendo pasado por diferentes etapas y enfrentándose a nuevos retos, como la implantación de las primeras fotovoltaicas en riego en el año 2005. En la actualidad, la empresa cuenta con clientes de la talla de El Pozo o Ibarra, expandiendo su labor al resto de España, de modo que el 80 por ciento de sus trabajos se producen fuera de Extremadura. Graginsa facturó el último año 18 millones de euros y cuenta con una plantilla de 150 trabajadores.
Otro de los homenajes del acto central recaerá en la empresa Samarkanda, que en este 2024 celebra su 30 aniversario con nuevos proyectos. Su responsable, Fermín Núñez, se ha mostrado agradecido por este reconocimiento que parte del Ayuntamiento de Almendralejo, recordando que los inicios de la compañía fueron a raíz de un taller del consistorio. El propio alcalde de la ciudad, José María Ramírez, ha manifestado que Samarkanda “ha sido el germen de otras empresas y directores de arte dramático”.
Por otra parte, a propuesta del Foro Agrario será Juan García Lavado el agricultor que será homenajeado en el acto central. En su representación, uno de sus hijos ha añadido que se sienten orgullosos de su padre, que “desde pequeño enseñó el trabajo del campo”. Además, también a través del Foro Agrario se ha designado a la persona portadora del racimo para la bendición del primer mosto, que ha recaído en Elena Gallardo, quien se ha mostrado ilusionada por ello. Según ha explicado, se encarga desde hace siete años de “gestionar el campo”, una decisión que fue “difícil” al principio en un sector en el que “es necesario el relevo generacional”.
