La Junta de Extremadura publicó en el DOE de 2 de agosto el Decreto 70/2024 con el objetivo de ayudar a las empresas de la región para paliar los efectos provocados por el aumento de la inflación del año 2022 con respecto al año 2021.
Afirma dicho decreto que la inflación media en las empresas de la región se mantuvo alrededor del 9% cuando la Unión Europea establece que la inflación saludable debe oscilar alrededor del 2%.
En el apartado beneficiario entran todo tipo de empresas de la región pero con las excepciones siguientes:
1. Acuicultura, pesca, ganadería o la producción primaria de productos agrícolas.
2. Las actividades relacionadas con juegos de azar y apuestas.
3. Actividades financieras.
4. Fabricación, transformación y comercialización de tabaco o de productos para la industria tabaquera.
El sector agrario soportó en estas campañas un aumento de costes de producción superior al 40%, ya que por ejemplo los fertilizantes y fitosanitarios aumentaron más del 150 % con respecto a años anteriores. Efectivamente la Unión Europea aprobó un reglamento por el que se permitía a los estados miembros utilizar fondos de otras medidas para ayudar a los productores agrarios a paliar los efectos de estas subidas en los costes de producción y así se ayudaron a ciertos sectores ganaderos y agrícolas. Otros en cambio no tuvieron ayuda alguna, como el sector del porcino ibérico, el sector del olivar o el del viñedo por ejemplo.
Intentar ayudar a las empresas extremeñas olvidándose de las del sector primario, es una clara discriminación de las principales creadoras de empleo y riqueza en la región, el Gobierno Regional queda muy bien ante la opinión pública pero la verdad es un abandono de la principal creadora de empleo y riqueza en la región.
La Unión insta al Gobierno de María Guardiola a rectificar y si de verdad quiere ayudar a las empresas extremeñas que empiece por no discriminar a las principales.