La empresa que se encarga de la evaluación de la situación de la cubierta de la piscina climatizada dispone de un plazo de un mes. Tras haberse llevado a cabo la firma del contrato, la portavoz del equipo de gobierno, Raquel del Puerto, ha recordado que consta de dos partes. La primera de ellas sería la relativa a la recogida de muestras y valoración del estado, mientras que la segunda se basa en la emisión de un certificado por parte de un laboratorio con la resolución definitiva de la situación y la propuesta concreta. Con ello se conocerá si se podrán reabrir las instalaciones hasta el desarrollo de la obra definitiva, que ya cuenta con un presupuesto asignado de más de 300.000 euros por parte del consistorio.
Del Puerto ha indicado en la radio pública que entiende el malestar de los usuarios y ciudadanos, pero “debe primar la seguridad”. La concejala ha afirmado que se estaba trabajando en el proyecto de renovación de la climatizada, cuando “todo se precipitó por la caída de un elemento en septiembre”. Además, ha insistido en que “no se ha ocultado información”, aunque destacando que “a raíz del último informe” tuvieron conocimiento de que hubo comunicaciones sobre la necesidad de actuación en la piscina en los años 2014, 2016 y 2018, afirmando la portavoz que esos informes “se omitieron y no se hizo nada”.