El viticultor Marcelino Díaz recibió el pasado domingo la medalla de Extremadura en el acto institucional organizado por la Junta en el Teatro Romano de Mérida con motivo del 8 de septiembre. El almendralejense fue uno de los impulsores del cava en la localidad junto a Pablo Juárez y Aniceto Mesías, ya fallecidos, y hacia quienes tuvo unas palabras de recuerdo. Durante su intervención en el acto agradeció la distinción que se le otorgaba, así como a quienes la habían impulsado.
Por su parte, Díaz manifestó que hacen falta más empresarios en Extremadura, abogando por la creación de industrias con productos demandados por los distintos mercados. Así, recordó que, “a pesar del cambio climático, Extremadura produce vinos tan buenos como en otras partes del mundo”, añadiendo que “del cava se habla mucho, pero se disfruta poco”. Además de hacer un llamamiento a los partidos políticos para que “desaparezca la crispación”, instó a los extremeños a “dejar a un lado las dosis de pesimismo”, sustituyéndolas por el “optimismo para desarrollar la Comunidad Autónoma”.