Manuel Mosquera ha comparecido hoy por primera vez tras su vuelta al Extremadura después de un mes y medio alejado del club, afirmando que en su regreso “hay mucho reconocimiento”. Así lo considera el técnico, que se ha mostrado agradecido por contar con él en la nueva etapa de la entidad, afirmando que tenía la sensación de la primera vez que entrena. El gallego se ha mostrado satisfecho por las personas que le han transmitido alegría por volver a dirigir al conjunto azulgrana, aunque también acepta las opiniones contrarias “porque es algo normal y natural”.
El gallego ha explicado que le sorprendió la llamada, de modo que en su mente no estaba la idea de volver, cuestión que considera “normal tras un cese”. Así, ha manifestado que jugadores, técnicos y más personal del club han influido en su regreso. Respecto a la situación de la plantilla, considera que “gracias al trabajo de todos”, los jugadores “están liberados”, por lo que mira al futuro con optimismo tras analizar la situación.
Tras analizar la situación durante estas semanas de ausencia, Mosquera ha manifestado que el equipo “estaba despegando”, pero “había muchos frentes abiertos”. Es por ello que ahora ha cambiado la situación con la llegada de Ramón Robert, Zoran Vekic y Jordi Lardín, con quien tiene previsto reunirse. Atendiendo a las palabras de la presentación del proyecto, está de acuerdo en que no es necesaria “una revolución”, ya que el equipo “tiene mucho nivel”, pero estaba “poco compensado”. El próximo envite será este mismo domingo, a las 17.00 horas en el Francisco de la Hera. Para el choque no contará con Sergio Gil y analizarán la situación de Owona. También ha añadido que es importante el hecho de poder contar con los jugadores del filial, a la vez que considera que algunos jugadores de la plantilla “llegarán a su nivel”. El cualquier caso, el entrenador ha añadido que “la exigencia ha subido” y “hay que ganar en el Francisco de la Hera”.