Malas sensaciones son las que ha dejado el Extremadura este domingo en el municipal Francisco de la Hera tras el encuentro ante el Mérida.
El conjunto de Almendralejo se tuvo que conformar con un empate a uno tras comenzar adelantarse en el marcador gracias a un tanto de Pastrana en la primera parte. No obstante, los romanos igualaron tras un penalti que Barbosa convirtió en gol, dando lugar al resultado definitivo (1-1). El equipo de Ruiz no pasa por su mejor momento, a pesar de que tenían “fe en que iban a sacar algo positivo”. Así lo destacó el entrenador tras el envite, añadiendo que “hay que seguir trabajando y sacar esta situación hacia delante”. Las palabras del técnico fueron contundentes en rueda de prensa, explicando que “es cierto que la inestabilidad del club no ayuda”, aunque asegurando que son profesionales que se abstraen “sin influir en el partido”. El almendralejense ha apostado por “sacar el mayor rendimiento posible” de sus jugadores, destacando que cuentan con “una plantilla de mucha calidad”. A pesar de todo, los azulgranas solo suman nueve puntos en siete jornadas.
También pasó por los micrófonos de zona mixta el capitán del equipo, que solo disputó unos minutos durante el encuentro. Kike Márquez fue preguntado por la suplencia, restando importancia, aunque con un tono serio. El andaluz manifestó que “las cosas no están saliendo bien”, ya que “son cuatro partidos en casa sin ganar”, por lo que “el punto no sabe prácticamente a nada”. Márquez indicó que “da igual la incertidumbre que rodea al club”, pero en el día a día “el jugador está atento a mil cosas diferentes y puede influir”. Hasta ha reconocido que él mismo debe “dar un paso adelante”, recordando una enseñanza de Manuel Mosquera basada en que “las excusas no valen para nada”.