J.J.R. // La hermandad de la Buena Muerte podrá disponer de un espacio para desarrollar diferentes tareas gracias al convenio firmado con Cajalmendralejo. Este acuerdo, que tiene una duración de cinco años prorrogables anualmente por otros cinco más, permitirá realizar allí distintas actividades cofrades, reuniones y cuestiones relacionadas con la obra social de la hermandad. El local se ubica en el centro de formación que la entidad tiene cedido al Ayuntamiento de Almendralejo, si bien, podrán usar una de las zonas que actualmente no se está utilizando, de modo que realizarán obras para contar con un acceso independiente. Todo ello lo ha explicado el hermano mayor, David Belinchón, añadiendo que con ello se paliarán las limitaciones de espacio que tienen actualmente en la propia Iglesia.
Esta cesión tiene lugar coincidiendo con el 25 aniversario fundacional de la hermandad, una celebración que finalizará el próximo 16 de diciembre con la clausura con una misa y la recogida de alimentos a favor de Cáritas que llevarán a cabo durante los próximos meses en colaboración con el colegio Antonio Machado. Por su parte, desde Cajalmendralejo se han mostrado satisfechos con el convenio, añadiendo que buscan colaborar con cualquier institución siempre que sea posible. Su presidente, Sebastián Guerrero, se ha referido al apoyo que brindan desde la obra social de la entidad a distintos eventos como Iberovinac y otras ferias de la región.
