El concejal de la Institución Ferial Tierra de Barros (Infetiba), Saúl del Amo, ha destacado que la última edición de Iberovinac “ha tenido un alto volumen de visitantes”. El edil se ha referido en RADIO COMARCA DE BARROS a la Feria del Vino y la Aceituna de Extremadura, destacando su buena acogida en el formato virtual que ha adoptado este año debido a la pandemia. Es por ello que se ha mostrado “sorprendido” por el número de participantes, mayor a otras ediciones y que ha impedido contar con más stands institucionales, obligando a dejar fuera alguno, como sucedió con el Consejo Regulador de Ribera del Guadiana.
En este sentido, el concejal ha explicado que contaban con un máximo y prefirieron atender a las empresas, en lugar de ocuparlos con la parte institucional. Además, han repartido unas encuestas entre los participantes para conocer la valoración del formato virtual, aunque la organización se ha mostrado satisfecha “y la plataforma era sencilla”. Del Amo ha explicado que ya una semana antes de su celebración fue cuando abrieron esta herramienta con el objetivo de que las empresas productoras fueran preparando sus stands, ya que se recreó el Palacio del Vino y la Aceituna.
Aunque durante la primera jornada se produjo alguna incidencia con los importadores internacionales, ya durante la segunda jornada se lograron superar con las directrices de Extremadura Avante. Además, el concejal ha indicado que se concertaron muchas entrevistas con los 15 compradores nacionales, aunque el volumen de negocio lo tendrán que valorar los exportadores. Por otra parte, en relación a la próxima edición y la publicación de su celebración en el calendario de ferias comerciales de la Junta de Extremadura, Del Amo ha explicado que la evolución de la pandemia será determinante. El equipo de gobierno barajó diferentes fechas para no coincidir con la celebración de San Marcos o el día del trabajo, además de no solaparse con otras ferias de similares características. Además, también habrá que conocer la situación una vez se acerque el momento, de modo que el gobierno local abogó por dotar a Iberovinac de una parte lúdica.
