J.A. Forte .-Una vez más, el salón de plenos del Palacio de Monsalud acogió uno, el correspondiente al mes de junio del año en curso.
Nueve puntos en el orden del día más una moción por urgencia presentada por el grupo popular, ésta sobre el cambio de nombre de la calle Arturo Suárez Bárcena, que para poder cumplir con la Ley de Memoria Histórica pasará a denominarse Calle Familia Suárez Bárcena, este punto fue aprobado por unanimidad de ambos grupos con representación en el Ayuntamiento.
Se dieron a conocer al pleno 28 decretos y resoluciones de alcaldía que había sido cambiadas o reformadas. Igualmente fue aprobada por unanimidad la propuesta de conceder al médico recientemente fallecido Fernando Aixalá Bové el título de hijo adoptivo.
También se aprobó por unanimidad, aunque se produjo discusión sobre fechas y otros edificios, la cesión a la Junta del edificio del Conservatorio Oficial de Música “Tomás Bote Lavado”.
Al finalizar el pleno, el grupo de la oposición volvió a entrar en el salón, ya que durante el turno de respuestas a las preguntas formuladas en el último punto del pleno, dicho grupo abandonó el salón al considerar insultos varias de las respuestas del Partido Popular.
Los puntos cinco y seis se trataron de forma conjunta, aunque la votación hubo de hacerse por separado. Eran los puntos sobre modificaciones del anexo de inversiones del presupuesto general del 2018 y el expediente de concesión de crédito extraordinario.
Fueron aprobados por la mayoría absoluta del Partido Popular, ya que la oposición votó en contra al no entender cómo sucedían tantos cambios en unos presupuestos recién aprobados, acusando al equipo de gobierno de falta de previsión y de hacer unos presupuestos de copia y pega.
La ordenanza reguladora de la tarjeta ciudadana fue aprobada por unanimidad, aunque la oposición se quejó de podía incluir más apartados y no lo mínimo como llevaba el PP al pleno, poniendo como referencia tarjetas similares en otras poblaciones.