REDACCIÓN // El hermano José Cárdenas se ha incorporado hace unas semanas a la Fundación San Juan de Dios en Almendralejo, donde ocupa el cargo de consejero-directivo. En su nuevo cometido se ha mostrado ilusionado, añadiendo que afronta esta experiencia “con cariño” tras haber sido decidido así por el Superior Provincial. En declaraciones a la radio pública ha afirmado que no conocía personalmente la capital de Tierra de Barros, que ha visitado recientemente para conocer las instalaciones de la fundación y su personal. Así, ya ha tenido la oportunidad de departir con su gerente, Federico Gil, del mismo modo que ha ocurrido con sus voluntarios y el personal de atención domiciliaria. El hermano Cárdenas, natural de Montilla (Córdoba), es enfermero y diplomado en Teología de la Vida Religiosa y en Alta Dirección de Instituciones Sociales, además de poseer un máster en Formación y Gestión en Medicina Humanitaria. Según indican desde la orden hospitalaria, sus conocimientos sanitarios y de gestión los ha desarrollado en todos los destinos que le han sido encomendados dentro de la Provincia bética, que abarca las comunidades de Extremadura, Madrid, Andalucía y Canarias. Sin embargo, su estancia durante 21 años en África ha marcado su trabajo “por ver las necesidades del lugar”.
En el Capítulo Provincial, celebrado en el mes de enero en El Escorial, fue elegido cuarto consejero del Gobierno de la Provincial Bética y semanas más tarde, el hermano Superior Provincial, José Antonio Soria, hizo público su nombramiento como consejero-directivo de la Fundación San Juan de Dios-Extremadura. Durante el último cuatrienio, Cárdenas ha estado al frente de la Ciudad San Juan de Dios en Las Palmas de Gran Canaria, un centro que atiende diariamente a más de medio millar de niños y adultos con discapacidad intelectual a través de varios dispositivos. Con su llegada a Almendralejo, el hermano volcará su servicio hospitalario con los enfermos, con las personas mayores y las familias que atraviesan situaciones de vulnerabilidad.