J.J.R. // El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, manifestó ayer en Almendralejo que el compromiso con el proyecto de regadío de Tierra de Barros es “firme”. Estas declaraciones las realizaba tras la polémica suscitada por la votación del PSOE a favor de una propuesta de Podemos para eliminar los incentivos a los nuevos regadíos. En cambio, el jefe del Ejecutivo autonómico ha añadido que “no se ha entendido”, aludiendo a que se trata de una propuesta para “ir a debate”, afirmando que no quiere “que se juegue con trampas”. Así, ha afirmando que se está buscando financiación “desde el primer momento” y el objetivo es contar a finales de año con una estrategia-marco para la economía verde y circular en Extremadura que sea “el resumen de lo que quiere hacer la mayoría”.
Además, tras reclamar el equipo de gobierno mayor apoyo económico a la Primavera Enogastronómica, Fernández Vara ha añadido que se encontró “una situación complicada” y hay cuestiones que “impiden” destinar más fondos. Se refería al desfase económico existente en el Servicio Extremeño de Salud (SES) y que cifró en 150 millones de euros.
En otro orden de cosas, tras las ayudas solicitadas por el sector agrario como consecuencia de las escasas precipitaciones en la región, Vara ha añadido que están “preocupados”, apostando por una economía verde y luchar contra el cambio climático. No obstante, ha asegurado que “la Junta no puede ser una gran compañía de seguros que llegue a todo”, aunque harán “los esfuerzos necesarios”.
