JUANJO REYES // Un sueño cumplido. Así podría definirse la andadura del deportista Juan Bautista en su paso por los Juegos Paralímpicos de Río de Janeiro. El palista, afincado desde hace años en Almendralejo, consiguió importantes logros a base de esfuerzo y entrenamiento. Podría ser el ejemplo de que las metas se alcanzan a base de dedicación y trabajo. En su participación en los Juegos ha conseguido un diploma a nivel individual y una medalla de plata junto a la selección española de tenis de mesa. Por todo ello, amigos, familiares y aficionados al deporte han querido recibir al medallista en su regreso a Almendralejo en la tarde del viernes. En torno a 200 personas esperaban en la estación de Renfe hasta que se produjo la llegada de Bautista. No faltaba la escuela de tenis de mesa de Almendralejo y una representación del ayuntamiento. Todos quisieron darle la bienvenida para agradecerle que haya llevado el nombre
de la capital de Tierra de Barros hasta los Juegos Paralímpicos. Es por ello que una de sus hijas, Ana Pérez, también quiso dedicarle unas palabras para mostrarle su orgullo y admiración.
Visiblemente emocionado, Bautista también se dirigió a los ciudadanos allí presentes para trasladarles su gratitud. No se olvidó de todas las personas que le han acompañado en su trayectoria deportiva durante su carrera, acordándose de instituciones, empresas, compañeros, familiares y el resto de ciudadanos. El acto finalizó con una caravana de coches que recorrió diferentes calles de la localidad.