La Junta de Gobierno Local celebrada el pasado 14 de abril aprobó el proyecto de demolición del edificio conocido como sindicato y que se ubica en la Plaza de Extremadura. Como saben, la intención que el equipo de gobierno ha mantenido durante los últimos años ha sido derribarlo para darle continuidad al bulevar de la Avenida de la Paz que se inicia en la glorieta presidente Adolfo Suárez. Desde el año 2006, el Ayuntamiento de Almendralejo estuvo inmerso en un pleito con el Ministerio de Empleo, hasta que finalmente se solucionó el conflicto sobre la reversión del edificio al municipio. Así lo indicaba la sentencia, manifestando que contaban con el plazo de dos meses para que los usuarios de esta parcela de 500 metros cuadrados la desalojaran. Tras el traslado de la Coordinadora Empresarial de Almendralejo (Ceal) al Centro de Innovación Empresarial, son las centrales sindicales –UGT y CC.OO.- quienes continúan dando uso a estas instalaciones que serán demolidas. Es por ello que han de encontrarles una nueva ubicación, una decisión que no corresponde al ayuntamiento, si bien, han mostrado su voluntad de colaborar con el propio ministerio. Además, según informó esta emisora, el alcalde ya calificó como “fácilmente alcanzable” la posibilidad de llegar a acuerdo con el citado ministerio y construir un nuevo edificio que las albergue. Incluso se ha barajado la posibilidad de que sea “en una parcela integrada en un conjunto de edificios que guarden más relación con su presencia”, según avanzaba en su día el alcalde en la RCB, por lo que podría ubicarse junto al Centro de Innovación Empresarial. Así, el delegado de Obras, Juan Daniel Bravo, ha indicado que las conversaciones con el Ministerio de Empleo y Seguridad Social están “avanzadas”.
En cuanto a la demolición, el proyecto saldría a licitación por una cantidad aproximada de 90.000, según han confirmado a esta emisora, si bien, ese coste podría verse reducido con las bajas que presenten las ofertas de las distintas empresas que opten a realizarlo, para lo que aún no se conoce la fecha.
En cualquier caso, la aprobación de su demolición supone el primer paso para la remodelación de la zona tras la reversión al municipio, una opción que también agrada al PSOE, según manifestaron en su día.