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El número de efectivos de la Guardia Civil se verá reforzado próximamente con el objetivo de disminuir el número de robos en el campo que se está produciendo en Extremadura durante los últimos meses. Esta ha sido una de las conclusiones que se pueden extraer del encuentro que se ha celebrado esta mañana entre la Delegación de Gobierno, la Junta de Extremadura y las organizaciones agrarias. En declaraciones a esta emisora, el secretario general de UPA-UCE en la región, Ignacio Huertas, ha valorado positivamente esta reunión, manifestando que “hay una preocupación alarmante en el sector” a raíz de los sucesos ocurridos durante los últimos meses. Sobre ello, también ha añadido que “está afectando a la seguridad personal”, por lo que necesitan “una actuación inmediata”, lo que han transmitido a las Administraciones. En este sentido, existe un compromiso para reforzar la seguridad con más efectivos, sobre todo, en las zonas donde aún queda aceituna por recoger. Desde las organizaciones agrarias también han trasladado que “no se roba si no se vende”, por lo que han puesto de manifiesto la necesidad de “controlar los puestos de venta”, solicitando una “vigilancia exhaustiva en los puestos privados de recogida de aceituna”, además de identificar “de dónde procede” el producto.
Desde UPA-UCE también han solicitado que se pongan en marcha medidas de carácter estructural, de modo que la próxima semana se constituirá una mesa de seguimiento para analizar cuáles son las medidas que se pueden llevar a cabo en vista a próximas campañas, sosteniendo que estos robos en el campo no se producen solamente en el periodo de la aceituna. Así, Huertas sostiene que estos sucesos provienen de bandas organizadas, añadiendo que la Guardia Civil está haciendo un buen trabajo, aunque “están dotados de pocos medios”. Todo ello ha repercutido en que “se ha generalizado el problema”, según la organización agraria, lo que ha conllevado a que “agricultores y ganaderos se están organizando de forma coordinada” para detener estos robos.
