La suspensión de eventos está afectando a diversos sectores empresariales, de modo que han visto cómo ha caído su volumen de negocio. Una de las próximas fiestas que se ha visto cancelada es la celebración de los carnavales, una de las fechas más fructíferas para Almacenes Casa Ángel, un referente en la ciudad que se ha convertido en el lugar preferido para adquirir las telas y los accesorios necesarios en la confección de disfraces para comparsas y particulares.
Sus tejidos pueden verse en trajes de toda la geografía europea, mientras que en España llegan a cualquier punto del país. Su responsable, Joaquín Horrillo, ha manifestado que la crisis está afectando a su negocio, de modo que sus trabajadores se encuentran en ERTE y la capacidad de la empresa ha caído al diez por ciento en un mes en que deberían estar “sobrepasados”. A ello se suma otras fiestas canceladas que también requerían de sus telas, como Semana Santa.
Sin embargo, el carnaval es una de sus fuentes de ingresos más importantes, comenzando a preparar los trajes de muestras inmediatamente después a su celebración, para a partir de junio llevar a cabo los grandes pedidos. Este año no será así, de modo que son “los pedidos de la página web los que están salvando la situación”, así como la ropa laboral, donde sí han notado un ligero incremento “debido a la necesidad de material desechable”.