El programa de inserción sociolaboral Crisol beneficia en la actualidad a 300 personas. Se trata de un proyecto financiado por la Junta de Extremadura que comenzó a finales del pasado mes de enero. Según ha indicado la concejala de Bienestar Social, Isabel Ballesteros, se centra en personas que residen en viviendas sociales o lugares con mayor tasa de desempleo, además de quienes necesitan ampliar su formación.
El objetivo es lograr su inserción laboral, de modo que se les ayuda a realizar currículos o celebran talleres conjuntos e individualizados, además de tratar “las competencias claves”. Para todo ello cuentan con una trabajadora social y dos educadoras sociales que se ubican en el edificio de Servicios Sociales.