La Comunidad de Labradores y Ganaderos de Almendralejo (CLYG) ha expresado en un comunicado su “rotundo apoyo” a la manifestación convocada por distintas organizaciones agrarias para el próximo 2 de diciembre bajo el lema ‘En defensa de nuestro campo’ y anuncia que acudirá a la movilización, que partirá a las 10.00 horas de la Consejería de Agricultura en Mérida. Este colectivo hace un llamamiento a toda la sociedad de Tierra de Barros para que participe o se solidarice “con la defensa de la agricultura para salvar la economía regional”. Antonio Ortiz Alcántara, miembro de la junta directiva, expone que el primer motor socioeconómico de Extremadura es el campo, porque, entre otras razones, representa cerca del ocho por ciento del Producto Interior Bruto regional.
El portavoz de los agricultores de Tierra de Barros hace un llamamiento para que profesionales y empresarios del sector agrario y ajenos a él, así como la sociedad en general, muestren su apoyo a esta manifestación en defensa de los intereses de los agricultores que, indirectamente, son los suyos propios. La Comunidad de Labradores de Almendralejo asegura que son muchas las razones que llevan a secundar esta movilización.
Los agricultores argumentan que a pesar de que día a día los responsables políticos veían los problemas que se iban sucediendo -primero con el desmedido encarecimiento de los insumos que venimos soportando los últimos 11 meses, después con el bajo precio de la uva y, por último, con la venta a pérdidas de la aceituna-, “no hicieron absolutamente nada ni para atenuar los costes del campo, ni para que se cumpliera la Ley de la Cadena Alimentaria, por lo que ahora nos encontramos con una actividad agrícola agonizante y unos agricultores al borde la asfixia, soportando una economía mermada desde hace más de una década”. Ortiz Alcántara explica que con subidas de precios como el 70 por ciento en el gasóleo, incrementos de más del 150 por cien en los abonos, subidas del 35 por ciento en las semillas y el encarecimiento de más del 250 por cien de la energía la agricultura es “simplemente inviable”, por lo que reclama medidas urgentes para paliar estos “disparatados incrementos de costes”.