A través de la contratación de agentes censales prevé el equipo de gobierno conocer la situación real de la ciudad. Como informó esta emisora, fue con el reparto de mascarillas en las farmacias cuando constataron que son miles de personas las que reciben sus servicios sanitarios y educativos en Almendralejo, pero no están censadas.
El alcalde, José María Ramírez, ha explicado que si existen entre 2.000 y 2.500 personas que no constan en el censo, ello repercute en una parte importante de los ingresos que llegan a través del Estado y que se calculan en función de la población. Es por ello que estos agentes se encargarán de cruzar los datos y realizar visitas a los domicilios con el objetivo de actualizar la situación.