Un grupo inversor tendría ganas de entrar a formar parte del Extremadura, según ha indicado hoy el entrenador del primer equipo, Manuel Mosquera, añadiendo que ha hablado con uno de ellos. “Hay entusiasmo y es gente con seriedad”, ha afirmado el míster en rueda de prensa, mostrándose “seguro de que va a salir bien”. A pesar de ello, el técnico ha manifestado que la situación “sigue siendo crítica”, pero añadiendo que tienen información al detalle. Mientras tanto, quien continúa en silencio es el propio presidente de la entidad, Manolo Franganillo, que ha acudido esta mañana a la ciudad deportiva para despedir a los futbolistas, que viajan ya camino a Irún para disputar el partido de mañana. De hecho, se ha subido al autobús para lanzarles un mensaje que no ha trascendido por el momento tras solicitar cerrar las puertas ante la presencia de la prensa.
Así las cosas, el conjunto azulgrana se enfrenta al envite de mañana con 13 jugadores en el convocatoria, ya que “no hay más para completar”, según ha afirmado Mosquera, explicando que Musa y Vargas han decidido no jugar a última hora, mientras que Sebas Coris ha pedido la baja y Sandaza tiene un golpe en la cabeza. A ello se suma que Villacañas está sancionado y será la próxima semana cuando tendrá que decidir, aunque su intención pasa por mantenerse en el club, según el entrenador. También esa sería la decisión de Casto y Morcillo. Con todo lo anterior, la entidad ha realizado ficha para el primer equipo a nueve jugadores del conjunto filial, del que se desconoce su situación para disputar el encuentro ante el Trujillo. Con estas nueve fichas, pasarían a ser futbolistas del primer equipo, en lo que Mosquera valora como una buena oportunidad. Quienes no disponen de ella son Mulero y el portero Álex.
El técnico ha señalado que las familias de los jugadores que se han quedado deben estar orgullosas porque son quienes “van a salvar el club”, solicitando el apoyo de los medios de comunicación y “la mano gigante”. En este sentido, ha destacado que “la vida” de una entidad no es un resultado, sino “la memoria, la esencia y la historia”. Espera que poder disputar el partido en Irún sea la primera piedra hacia el futuro, aunque reconoce que ha podido preparar poco el envite. No obstante, el gallego ha señalado que sus jugadores son chavales que realizaban un trabajo parecido con Cisqui, mostrándose confiado de poder lograr la victoria.