Se acortan los plazos para que el Extremadura logre una solución a sus problemas, siendo la fecha límite del administrador el próximo 20 de febrero. Lo ha recordado el entrenador del equipo, Manuel Mosquera, en la rueda de prensa previa al partido que medirá a la plantilla mañana al Calahorra. Mientras tanto, se limitan a “mantener al equipo en la competición”, confiando en que todo se resuelva de forma favorable y la entidad pueda continuar.
Es por ello que el técnico ha manifestado que ahora deben centrarse en el envite que disputarán a domicilio este sábado a partir de las 17.00 horas. Para ello dispone de 14 jugadores en una convocatoria similar a la anterior, pero con la ausencia de Pau, sobre el que ha añadido que todo apunta a que se marcha del club. Se uniría a la salida de Marcos Lavín, al que la FIFA ha indicado que no podría jugar hasta el 30 de junio, por lo que “no tenía sentido”. Además, Germán Ruiz estará de baja un mes debido a una lesión. Quien sí podrá jugar mañana será Álex Murillo, al que el míster ha reservado, pero ya ha tenido trabajo de contacto durante la jornada de hoy. Así las cosas, Mosquera ha indicado que intentarán ganar “con la dificultad añadida de tener una plantilla muy corta”.
Respecto al rival, el entrenador del Extremadura ha alabado al equipo, añadiendo que cuenta con “muy buenos futbolistas y tiene muy bien dominado el campo”. Es por ello que ha analizado el partido que disputaron contra el Zamora “al ser en casa”. Además, aunque ha lamentado la “gravísima lesión” de Martínez-Losa, sostiene que “es una baja importante” para el Calahorra. En relación a la plantilla azulgrana, Mosquera ha añadido que los futbolistas “están cada día mejor, aunque a dos saltos de su categoría”, por lo que considera que “están recibiendo los peajes” de ello, en alusión al último resultado. Por todo, ha elogiado el trabajo de los deportistas.
