Un total de 15 personas con cáncer de mama han comenzado un programa psicoeducativo a través de la asociación oncológica Tierra de Barros, cuyo objetivo es trabajar las secuelas psicológicas y emocionales en este tipo de pacientes. La psicóloga del colectivo, Laura Lozano, ha señalado que las secuelas físicas tienen mucha importancia, “pero en ocasiones se olvidan las psicológicas”. En ese sentido, del mismo modo que la asociación trata el linfedema, ahora se propone abordar aspectos del plano emocional como la ansiedad, la depresión o la falta de autoestima.
Para ello ha dado comienzo este programa basado en cuatro sesiones de dos horas, donde tratan estas temáticas con la finalidad de “dotar a las pacientes de herramientas y empoderarlas”. Lozano ha indicado que está realizando una investigación sobre todo ello, que también se incluirá posteriormente en un proyecto de Diputación de Badajoz.
El desarrollo de este programa se está llevando a cabo los lunes y miércoles en la sede de la asociación oncológica, de modo que han organizado una serie de terapias de grupo donde realizan dinámicas “para ir asimilando los conceptos de una forma más amena”. Así, la psicóloga ha explicado a esta emisora que existe un alto índice de personas que requiere atención psicológica tras el cáncer, muchas de ellas por miedo a la recaída. Además, ha destacado la importancia de contar con una buena red de apoyo para superar todo con una actitud más positiva, por lo que el colectivo da especial importancia a la familia. Por el momento ya se ha realizado la primera de las sesiones, que Lozano ha calificado como “muy positiva”, ya que han tratado las emociones “de forma muy participativa”.
