Las asociaciones agrarias Asaja, Upa-Uce, Afruex y los sindicatos CCOO y UGT han acordado un convenio del campo para Extremadura muy alejado de las posibilidades económicas de los empresarios agrícolas extremeños, así lo considera La Unión Extremadura.
El debate, según este colectivo, no solo está en si un trabajador debe cobrar un salario u otro, también hay que tener en cuenta si los cultivos y ganaderías pueden hacer frente a esos salarios.
Hay que tener en cuenta que se han establecido los importes mínimos, por encima de los cuales tendrá que negociar el empresario agrícola con los trabajadores, que en el caso de las recolecciones, y debido a la escasez de mano de obra, van a ser más altos.
En cambio, según La Unión, en el convenio no se establece ninguna norma para facilitar la disponibilidad de la mano de obra, normas que pongan trabas a la hora de cobrar los subsidios de desempleo en tanto hay ofertas de trabajo, como está sucediendo en la actualidad.
Con los costes de producción de esta campaña, añadiendo los incrementos pactados y la escasez de mano de obra, muchas producciones agrarias no van a ser rentables, por que se teme desde La Unión, que se van a seguir arrancando plantaciones de frutales y sustituyéndolas por otros cultivos mecanizados y que no necesiten mano de obra en el futuro.
Por último, desde la Unión Extremadura se hace un llamamiento a los empresarios de Asaja para que no permitan que sus dirigentes firmen un acuerdo que tanto daño va a hacer a la rentabilidad de las explotaciones agrarias.