J.J.R. // El proyecto de conversión en regadío de 15.000 hectáreas en Tierra de Barros utilizará energías renovables. Así lo ha confirmado este jueves el secretario general de Desarrollo Rural y Población, Manuel Mejías, incidiendo en que “forma parte de la política general de la Junta de Extremadura”. A su vez, ha aclarado que la intención que se busca con ello pasa por la “adaptación de los cultivos al cambio climático y la mitigación de sus efectos” con estas energías. El propio presidente de la comunidad de regantes de Tierra de Barros, Isidro Hurtado, ha aludido a este asunto añadiendo que “se han introducido mejoras” basadas en el “campo solar” para abastecer de energía a la comunidad de regantes. Todo ello se puso de manifiesto en la Asamblea celebrada en el salón de actos de Cajalmendralejo, a la que también acudieron los técnicos encargados de la redacción del proyecto para contar los avances en el mismo. Hurtado ha valorado positivamente el trabajo realizado por la empresa adjudicataria, recordando que el plazo finalizará el próximo mes de mayo. Además, ha recordado que se han producido reuniones entre la Junta y el Gobierno central buscando la declaración de interés general de este proyecto que permita que la Administración central participe en la financiación. Sobre ello también se ha pronunciado el alcalde de Almendralejo, José María Ramírez, destacando su apuesta por este proyecto, como así ha trasladado a la Delegación de Gobierno. El primer edil ha defendido el regadío en la comarca, añadiendo que es “importante” tener un flujo de agua “ante eventualidades” de la climatología.
Actualmente se están llevando a cabo los trabajos de redacción del proyecto, a la vez que se realizan determinadas prospecciones arqueológicas “para asegurarse de no tener que introducir cambios en el proyecto”, según ha explicado Mejías, que ha querido eliminar cualquier tipo de incertidumbre. Para ello ha recordado que se trata de 15.000 hectáreas, lo que requiere más tiempo que otros regadíos como el de Villanueva del Fresno, que ya se está ejecutando, o Monterrubio, que ha salido a licitación. El secretario general también ha indicado que existe un “firme compromiso” del ministerio para declarar el proyecto de interés general, para lo que habrá que esperar a la formación del Gobierno nacional. Mejías ha manifestado que estas iniciativas se vinculan a la “fijación de la población en el mundo rural”. El importe ronda los 200 millones de euros.
