La concejala de Bienestar Social, Isabel Ballesteros, ha destacado “la evolución en todos los sentidos” de los Servicios Sociales durante la presente legislatura. Para ello ha aludido al Servicio de Información, Valoración y Orientación (SIVO) de Servicios Sociales, cuya plantilla se ha incrementado hasta las diez trabajadoras, mientras que en 2019 era de siete. Así, ocho de ellas están repartidas por zonas, mientras que las dos restantes están destinadas a determinados casos más concretos. Con todo ello, llegó a la ratio exigida, además de “permitir un mayor reparto”, disminuyendo el número de personas a las que atiende cada trabajadora, además de “reducir las listas de espera”. La concejala también ha destacado la figura de las coordinadoras, quienes se encargan de tramitar las prestaciones.