Las bodegas de la D.O. Cava han finalizado la vendimia en la que ha destacado, según los Servicios Técnicos del Consejo Regulador, “un buen estado sanitario de la uva, con una acidez y graduación adecuada para la elaboración de grandes cavas”. Esta vendimia ha sido algo más larga de lo habitual debido a factores climáticos. Tras un 2020 marcado por un descenso considerable de la producción, este año la cosecha se ha situado en torno a los 300 millones de kilos de uva con destino a la elaboración de cava. Se ha llevado a cabo un minucioso plan de control de maduración de la uva a lo largo de la vendimia, y se han incrementado los controles en campo.